Digo icono, ya que aunque al margen de que sea o no de mi agrado, aportó un valor a niñ@s de varias generaciones, y creo que la mía fue de las últimas que recogió su testimonio, no sé si por la educación que recibí de mis ascendientes o bien porque tocaba, aún así, me llegó su espectáculo.
Recuerdo en casa que me ponían las canciones de sus hermanos, y recuerdo después del colegio el programa que tenía con su hija Rita. Un programa de niños pequeños, que igual, podemos observar que el valor añadido era escaso, pero lo prefiero a los programas que hay ahora.
Hoy en día, los programas infantiles no sólo aportan no aportan valores, sino que estamos creando generaciones perdidas. Por un lado, la generación posterior a la mía conocida como "Generación Pokemon", no es otra cosa que el fomento al maltrato animal, entrenar a una mascota para luchar con otra. Y como estas se pueden nombrar muchas más. Creo que sólo puedo concluir una cosa: como más variedad más idioteces, antes íbamos todos como borregos con tan poco canal de televisión, pero ahora hay distintas maneras de comer el coco.
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